Los primeros cumpleaños

Definitivamente esta es la semana temática de los cumpleaños de Salvador (o "Er Favadó" como le diría nuestro vecinillo Juan Daniel, que es por el momento el mejor amigo de Salva, pese a que tienen caracteres completamente diferentes). Como os comenté brevemente en la entrada anterior los dos primeros cumpleaños de Salvador fueron la locura total por nuestra parte, debo reconocer que nos pasamos un pelín con casi 65 invitados más o menos, así contados por encimilla, en cada uno de ellos. Era un cumpleaños, lo sé, y no una boda, así que medio dando la razón a Crisitna, el día que se case no sé qué haré, si Málaga se quedará vacía o la paralizaré o qué pasará. Pero como madre del novio que soy, creo sin temor a equivocarme (aunque me gustaría) que pintaré más bien poco ese día, pues en las bodas mandan las novias en exclusividad guiadas por sus respectivas madres. Las suegras (madres de los novios) nos limitamos a ejercer de madrinas, ver, oir y callar. Pero como soy un poco mandoncilla seguro que algo haré o dispondré, siempre con permiso de la nuera y la consuegra (que lo último que quiero es crear un conflicto familiar). Y no me digáis que me estoy equivocando en mis vaticinios muuuuuuuuuuuuuuuy lejanos (eso espero), pues es así y ya me estoy mentalizando para ello (una que es precavida)

Ya os comenté lo que su llegada al mundo supuso (por todo), y que su fiesta de cumpleaños es también una fiesta para nosotros, sus padres, de hecho, Salva casi no se entera mucho aún del tema, seguro que el año que viene es ya otra cosa. Así que con semejante número de invitados hubo que salir fuera de casa, en concreto los dos primeros cumples se celebraron en una cafetería que tenemos bajo casa y que cuenta con un gran salón para muchísima gente. Los de la cafetería pusieron un "picoteo" variado y las bebidas, pero es que nosotros encargamos empanadas, saladitos y canapés a una conocida panadería-pastelería de Málaga, además de las tartas, que siempre pusimos nosotros también. En resumidas cuentas, nos dejamos un pastón (esta feo hablar de dinero, ya lo sé), pero qué bien lo pasamos.

De verdad, que para el año que viene organizo sólo una fiesta infantil con todos los amiguitos de su clase con sandwiches y zumo. Aunque soy incapaz de organizar un evento íntimo, debe ser deformación profesional, me creo que estoy inaugurando una exposición, sólo me falta llamar a los medios de comunicación.

Os dejo algunas fotos de los dos primeros cumpleaños:

Este es un momento de su primer cumpleaños, lo tengo yo en brazos, qué pequeñito, viendo las fotos de varios años seguidos te das cuenta lo que ha crecido y lo mayor que se está haciendo mi bebé (ainsss) y es que el tiempo debería transcurrir más lento

Esta fue la tarta del primer cumpleaños, llevaba una imagen de Salva que nos hacía especial gracia

Esta es la foto en concreto que se empleó para su primera tarta, está de lo más "salao", no me digáis que no, y con una indumentaria de 10: pijama naranja, gorra que mi padre le había comprado de Spiderman, corta-viento rojo y babero, y es que acababa de llegar de casa de mis
padres y ya venía con el pijama puesto para dormir

Y esta es la tarta del segundo cumple, tiene buena pinta ¿verdad?

Y este es Salvador el día de su segundo cumple

Y aquí metiendo la mano en la tarta, que para eso era suya.

Antes de despedirme hasta la siguiente entradita quiero dejar un mensaje a MOSCHINO HIPPY CHIC: he entrado esta tarde en tu blog y me he encontrado con la sorpresa de que los has privatizado, pero soy muy torpe y no veo la forma de poder contactar contigo y que me invites como lectora, así que porfi mándame un correillo a la dirección que te aparece en blog y dime qué debo hacer. No me olvides ¿vale?

Buenas noches, que soñéis con lo que más os guste. Besos.

Inma