domingo, 30 de marzo de 2014

El segundo capricho de la temporada

Otra semana sin pasar por aquí, pero es que no hemos parado, por lo menos yo, y eso que ando a medio gas, que sino..... 
El domingo 23 tocó el cumple de G y el martes 25 el cumple de DG que se celebró en la playa. Los papás de DG tienen un restaurante en primera línea de playa en Torremolinos y decidieron invitar a la clase entera a pasar el día y comer, así como a las profesoras de los enanos y a algunas madres, entre ellas yo. Lástima que no pude estar desde las 10 de la mañana que llegaron , me incorporé a la salida del trabajo justo para comer, pero el rato que estuve lo pasé genial,  y ya no digo nada los enanos todo el día jugando en la arena, con deciros que Salva nada más llegar a casa y ducharse se durmió. Hizo un día estupendo, con 25 grados, la arena fantástica además de muy limpia, se nota que aún no hay avalancha de guiris, y la comida lo mejor,  prepararon una paella para todos, además de pescaíto frito, tarta y helados. Es lo que tiene vivir al sur del sur en un lugar privilegiado, porque hay cosas que son impagables y nosotros tenemos la suerte de disfrutarlas cuando nos apetezca. Por cierto, estamos pensando en repetir, pero las madres enrolladas (las estiradas y bordes noooooooo) y las profes solas, las criaturas en casa con los padres. Por cierto hay un grupito que a ningún cumpleaños va y encima ni avisan y ni saludan a nadie cuando te ven cada mañana pero a comer gratis a la playa resulta que había cola y algunas hasta se han picado porque la madre de DG dejó claro qué madres quería que fuésemos, manda huevos, pero claro tampoco sabían que se celebraba en cumple de DG que sólo lo sabíamos las madres invitadas. Estas listas se creían que nunca les llegarían la hora de pagar tanto estiramiento. 

Después el jueves volví de parrandeo aunque realmente estaba trabajando, esta vez solita sin marido e hijo, el marido trabajaba y el niño se quedó con mis padres. Este mes nos visita en la sala un grupo de artistas de Madrid con el que ya hemos realizado varias exposiciones aquí y en los Madriles, además me tocó hacer de anfitriona porque el jefe se ha tirado varios días "off" en la cama por culpa de un cólico nefrítico, así que tras inaugurar la exposición los invitamos a cenar a El Pimpi, lugar recomendable 100% y visita obligada si venís a Málaga, de hecho es lugar de paso de artistas, folclóricas, toreros, futbolistas, nobles, intelectuales, políticos o cualquier otro famoso que pise Málaga pues es de esos lugares con solera y encanto como pocos en el mundo. El Pimpi tiene una historia increíble y eso se percibe nada más traspasar sus puertas. No hay cosa más que me guste que ir al Pimpi y subir al palomar, y precisamente por la estrecha amistad de mi jefe con el dueño vamos mucho, todos los homenajes, reconocimientos y comidas que damos en el trabajo lo hacemos allí. Cenamos de lujo a base de ensaladilla malagueña, ensaladilla de pimientos rojos con atún, frituras de pescado, berenjenas al horno con salsa de puerros y gambas que vaya cosa rica y de postre frutos rojos con helado de limón. Exquisito. Por cierto, si vais os recomiendo sus ligeritos, su salmorejo y por supuesto el pescaíto frito, aunque la lista de exquisiteces propias de la gastronomía malagueña que tienen es inmensa y probarlo todo es imposible. Lo pasamos pipa, empezamos hablando de casas con fantasmas y terminamos con chistes subidos de tono muertos de la risa. 
Las vistas de El Pimpi son un lujo, está en plena judería, pared con pared al Museo Picasso, además cenamos fuera teniendo como vistas privilegiadas la Alcazaba y el Teatro Romano iluminados, para colmo era la Semana del Cine Español que se celebra cada primavera en Málaga y el centro estaba de bote en bote de gente guapa. No se puede pedir más. No hace falta que os diga que al otro día no podía con mi "arma". Muertecita me hallaba y es que por más que quiera estoy mu mayó.
Fotos malas pero es lo que hay. 1. Ensaladillas de pimientos rojos con atún (izquierda) y malagueña (derecha) 2. Fritura de pescado 3. Berenjenas con salsa de puerro y gambas 4. Vistas a la Alcazaba y Teatro Romano 5. Ambientazo de la terraza de El Pimpi pese a ser jueves y las 12 de la noche 
Y dejamos a un lado tanto parrandeo y tanta comida y nos centramos en los trapos, concretamente en el segundo capricho de la temporada que no es otro que este pantalón corto tipo chino en color camel y con anclas bordadas del mismo color de BASS 10 que fue también amor a primera vista y es ideal todo él. Las fotos de nuevo malas, lo siento.

Lo combinamos con un montón de colores, rojo, azul, verde, rosa, celeste, blanco o rayas. Especial atención requieren los polos de Benetton, con un precio fantástico de 12'95 €, este año han caído el rojo y el verde con unos tonos absolutamente vibrantes y muy veraniegos.

Esta semana intentaré actualizar, pero la tengo apretada una vez más: otros 2 cumpleaños, reunión de vecinos que promete complicada pues además suelto la presidencia de la comunidad, visita al dentista y la mañana del jueves entera en el Materno desde las 8.30 que me tengo que sacar sangre para ver cómo de espesita está mi sangre, posteriormente a las 11.00 control mensual en la consulta de alto riesgo y a partir de las 13.00 horas visita al hematólogo para recoger el resultado de la analítica de las 8.30, vamos una alegría, y evidentemente más todo lo que surja.
Besos. Inma

1 comentario:

Rocío dijo...

Chica no paras, cuando estuve en Málaga visité el pimpi, qué rcuerdos me ha traido, a mí me encantó y esa comidita rica que teneis por ahí. El pantalón me encanta, ya veo a mi gordi con uno, y los polos de benetton totalmente fantasticos, gracias a ti los compro mucho.
Rocio
Bsoss